Cultura Profética:
15 años  como profetas de su tierra
 
 
Por Rosa Rebecca Aymat López
De KooltourActiva
   
Cantamos porque el grito no es bastante
y no es bastante el llanto ni la bronca.
Cantamos porque creemos en nuestra gente
y porque venceremos la derrota”. Cultura Profética
 

 

 

El escritor francés Alfred de Musset (1810-1857) dijo en una ocasión que Lo realmente importante no es llegar a la cima, sino saber mantenerse en ella”. Son muchas las bandas que a diario irrumpen en el mercado musical, pero son muy pocas las que logran mantenerse en el gusto del público con el pasar de los años.

No es casualidad que las que sí lo han logrado es porque han presentado propuestas innovadoras. Un ejemplo fehaciente de ello es el grupo Cultura Profética, exponente del reggae, que recientemente celebró sus quince años de trayectoria.

Dicen que hay encuentros que no son sólo cruces. Este es el caso de los jóvenes músicos Willy Rodríguez (vocalista principal y bajista); Eliut González, Omar Silva (guitarristas); Iván Gutiérrez (tecladista) y Boris Bilbraut (baterista y cantante), quienes desde que se unieron con la única finalidad de hacer música en 1996, han revolucionado la escena del reggae con sus textos cargados de poesía social. 

Luego de muchas horas de ensayo y de tocar covers” de Bob Marley en varios pubs, surgió oficialmente Cultura Profética. El nombre surgió de prisa, cuando tenían una presentación y aún no contaban con uno que los identificara. Fue entonces que a Boris se le ocurrió Profetic Culture”, que luego traducirían al español. Pero sería más tarde que entenderían el peso y la importancia del nombre seleccionado.

Desde su primer disco Canción de Alerta (CDT-71088), editado por la hoy desaparecida Casa de los Tapes en 1998, la propuesta de Cultura Profética se ha caracterizado por la denuncia social y política (no partidista). En esta producción se encuentra su tema emblemático y el que obligatoriamente tienen que tocar en cada una de sus presentaciones: Fruto de la tierra. Este disco fue grabado y mezclado en Tuff Gong, estudio de grabación donde Bob Marley and the Wailers produjeron sus grandes éxitos.

En 1999 sale al mercado el segundo “fruto” de la agrupación, Ideas Nuevas (Luar Music, CD-91091). Es con esta producción que se consolidan como unas de las mejores bandas de reggae latinoamericanas. En este álbum, considerado por muchos de sus seguidores el mejor de su discografía, se atreven a explorar otras corrientes musicales, así como a hacer denuncias más fuertes. Cuenta con la participación de Guillermo Bonetto, vocalista del grupo argentino Los Cafres, en el tema Suelta los amarres y con la de Bernard Collins, cantante y líder del trío jamaiquino The Abyssinians, en So Much Trouble.

Exactamente el 8 de enero de 2001 vio la luz Cultura en vivo (Luar Music, CD-7020223), grabado durante una presentación en el Anfiteatro Tito Puente el 12 de mayo de 2000. Advertencia, Con truenos hay que hablar, Funkadera, Fruto de la tierra, Ideas nuevas, No me busques, Pasiones, guerrillas y muerte, Suelta los amarres y Ya no hay este último, con la intervención del grupo Los Cafres y un Medley que entrelaza Canción de alerta, Con truenos hay que hablar, Despertar y Enyoyando conforman el material que nos ofrece.

Ya avanzado el año siguiente, 2002, salió Diario (Luar Music, CD-70006). Podríamos decir que este es el disco de transición, pues en el mismo se percibe que estos músicos ya tienen otras inquietudes. Por primera vez abordan el tema de relaciones de pareja en canciones como De Antes y Verso, pero sin alejarse de su esencia: los temas sociales. El  primer sencillo de esta producción, Bieké, se convirtió en un himno para aquellos que apoyaban la salida de la Marina de Estados Unidos en Vieques. Esta decía: Marchando para Bieké, plantando bandera en Bieké, reggae para liberar a Bieké, reggae para liberar a Bieké…” 

 
Crisis, indecisión y momentos de cambio y reflexión…
 
 
 Como siempre ha ocurrido en las agrupaciones musicales, Cultura Profética atravesó una crisis en la que sus integrantes no sabían con claridad qué rumbo darle a sus respectivas carreras. La salida de Iván Gutiérrez generó incertidumbre entre este colectivo. Cuando se fue Iván, nos volvimos a preguntar, “¿qué es Cultura? ¿Qué queremos hacer? Y tuvimos que volver al pasado, porque ya habíamos desarrollado una química que ahora hay que volver hacer con el que llegue nuevo”, manifestó Willy Rodríguez, entrevistado para la hoy desaparecida revista Andariego (2006).

Durante ese período de reflexión, cada uno de los integrantes comenzó a trabajar en otros proyectos. Unos estaban tocando con Umoja, otros con León de Judá e, incluso, Willy coqueteó con la idea de lanzarse como solista. Fue con la llegada de Bayrex Jiménez (tecladista) que definieron sus objetivos. Viajaron a México donde estuvieron acuartelados por cuatro meses.

De las experiencias y vivencias que experimentaron en dicho país, surge su quinta producción, M.O.T.A / Momentos de Ocio en el Templo del Ajuzco (Sony Latin, CDZ-7508292), editada en 2005. En este hermoso viaje musical es notable la madurez no sólo en el sonido sino también en los textos. Con este nuevo repertorio se fueron de gira por varios países latinoamericanos y compartieron escenarios con valiosos artistas nacionales e internacionales. Este compacto contiene canciones que son inolvidables como Canto en la prisión (compuesta por el ex preso político Elizam Escobar); No me interesa, en la que le exponen una Carta Abierta al Presidente de Estados Unidos y Lo de más, tema original de Silvio Rodríguez que adquiere una mística especial en las voces de Boris y Willy. Su próximo lanzamiento, el exitoso Tribute to the Legend Bob Marley (Sony Latin, CDZ-7186312), aconteció el 18 de octubre de 2007 y, en base al mismo, se realizaron varios conciertos.

Con esta abundante experiencia, bagaje artístico y la llegada de su nuevo tecladista Juan Carlos Sulsona (ex miembro de Gomba Jahbari) entran nuevamente al estudio de grabación para producir su más reciente propuesta, La dulzura (Sony Latin / La Mafafa, CD-7895442), que salió al mercado el 30 de marzo de 2011. Con este disco dan un giro dramático a su carrera al alejarse de los temas sociales que tanto los habían identificado para darle paso a dulzonas melodías sobre amor y relaciones de pareja.

 

La dulzura (2011): el más exitoso álbum de su discografía.

 

¿Interés de expresar ideas nuevas o necesidad de vender discos? Con la primera de las canciones incluidas, Rimas pa seducir, intentan explicar el por qué de dicha decisión: Quieren que  hable. A oídos sordos que los celebre que toquen fondo, a oídos necios palabras sordas, si se conforman pa qué insistir. En estos días busco amor. Pensar en cosas que me hagan reír”.

Amante luz, Del tope al fondo, En la obscuridad, Ilegal, La espera, Para estar, Somos muchos, Verso terso y los éxitos Baja la tensión y La complicidad, más una excelente versión del clásico bolero cubano Me faltabas tú, de José Antonio Méndez, completan el repertorio de este trabajo.   

Aunque esta propuesta no agradó a muchos de sus fanáticos, pues entendían que los apartaba de la línea establecida, lo cierto es que ha sido el álbum más exitoso que el quinteto ha grabado hasta la fecha. Tanto así que fueron nominados a un premio Billboard Latino. Sin dudas La dulzura fue una apuesta arriesgada. Pero, ¡qué bueno que existan grupos dispuestos a hacer este tipo de !“locuras”! Porque el resultado fue grandioso. Lograron con éxito ponerse “dulces”, pero sin llegar a ser empalagosos. Las letras románticas con un toque erótico, pero no vulgar, hacen de esta producción una pieza obligatoria en las colecciones de todos aquellos que gustan de la buena música.

Al hacer un repaso de los quince años de trayectoria de Cultura Profética, podemos decir que hasta el momento ha sido la banda de reggae puertorriqueña más importante. El contenido de los textos de sus producciones son ejemplo de que la música constituye un espacio alternativo de resistencia para apoyar sectores afectados por la desigualdad social, política y económica que ha marcado nuestra historia. Incluso, para ponerse dulces. 

Pero la trascendencia de Cultura Profética es que, gracias al talento de sus integrantes, ha roto con el estereotipo de que escuchar reggae es simplemente vestir una camisa con la imagen del venerado músico jamaiquino Bob Marley y fumar marihuana o “dreadlocks”. En fin, este grupo ha demostrado que el reggae es música que socializa y que contribuye a la capacidad de la juventud de construir una cultura de protesta ante la injusticia social. Espero que sigan surgiendo formaciones como esta y que Cultura Profética celebre muchos aniversarios más. ¡Que viva el reggae!

PD: además de su propia discografía, el legado de Cultura Profética incluye colaboraciones con los siguientes artistas:

• Arianna Puello.-. Interviene en el tema Somo lo que somos.

Jowell & Randy. El momento (Machete Music, MM-001435502), mayo 4, 2010. Interviene en el tema
   Sólo por ti.
 
La Secta All Star. El Hit Parade (Universal Music Latino, B000820302), editado diciembre 19, 2006. interviene en el tema Vino viejo.
 
Vicente García. Melodrama (EMI Latin, CD-09526), editado octubre 25, 2010. Interviene en el tema Mi balcón.

Gocho.- interviene en el tema Culpables.

Vico C. Desahogo (EMI Latin, CD-77956), editado marzo 1, 2005. interviene en el tema Te me puedo escapar.

Vico C. Colaboraciones de ayer y de hoy (EMI Latin, CD-46136), editado noviembre 1, 2011.

 

R.R.A.L. / KTA.
Noviembre de 2011.

 

 

 

 

 

 

 

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