Por Rosa Rebecca Aymat López


Al iniciarse la década 1880-1890, el Partido Liberal Reformista atravesaba una seria crisis, sobre todo a nivel organizativo. Con el propósito de detener el descalabro total de esta colectividad, a mediados de aquel decenio algunos de sus dirigentes empezaron a madurar la idea de una reorganización total, poniendo manos a la acción en febrero de 1886 bajo el liderato de Román Baldorioty De Castro.
Como suele ocurrir cuando se dan procesos políticos de esta naturaleza, los choques ideológicos no demoraron en surgir: el sector liderado por Baldorioty De Castro defendía una autonomía radical, mientras que otro grupo, encabezado por el cubano Rafael María De Labra, apoyaba una autonomía moderada. El 7 de marzo de 1887, en lo que luego se conocería como la Asamblea de Ponce, el entonces Partido Liberal Reformista dejó de identificarse así, para convertirse en el Partido Autonomista Puertorriqueño. En dicha actividad política triunfó contundentemente la tesis planteada por Rafael María de Labra.
Hoy la historia se repite. Porque, casi 124 años después, dentro de las filas del Partido Popular Democrático (PPD) se está viviendo algo similar. Resulta que esa colectividad, fundada por Luis Muñoz Marín en 1938, se ha dividido en dos bandos: los soberanistas y los populares de derecha.
KooltourActiva entrevistó al representante soberanista Luis Vega Ramos con el propósito de conocer su posición sobre está polémica y al mismo tiempo, que nos diera su opinión sobre el Movimiento Unión Soberanista (MUS).
Vega Ramos nació en San Juan, el 11 de junio de 1970. Cursó estudios en Ciencias Políticas y Derecho en el Recinto de Río Piedras de la Universidad de Puerto Rico. Durante sus años de formación académica presidió la Juventud Universitaria Autonomista y ocupó varias posiciones en los organismos de representación estudiantil, incluyendo un escaño en la Junta Universitaria de todo el Sistema UPR. Fue en el 2006 que comenzó formalmente su carrera política al resultar electo para ocupar la vacante surgida tras la designación de Carlos Vizcarrondo Irizarry al Tribunal Apelativo de Puerto Rico. En los comicios del 2008, revalidó en su escaño cameral, figurando tercero entre los legisladores populares que mayor cantidad de votos obtuvieron.
Ha publicado cuatro libros: La Nación en Asociación – que estuvo en la lista de los más vendidos durante el año que vio la luz – (2000); Baldorioty ahora – colección de ensayos sobre este prócer autonomista – (2002); Entre fraude y dignidad: una elección para la historia – crónica sobre la jornada electoral de 2004 – (2005) y Pan, Tierra y Libertad: historia y filosofía del Partido Popular Democrático (2006).
En su libro Baldorioty Ahora, usted dice y lo cito: “Los Autonomistas de hoy no nos podemos conformar con la Carta Autonómica de 1897 ni con el Estado Libre Asociado de 1952”. Al afirmar esto, ¿quiere decir que el ELA ya no es una alternativa viable para nuestro desarrollo económico? Entonces, según usted, ¿hacia dónde nos debemos mover?

“Bueno… los primeros que entendieron que el Estado Libre Asociado no era un producto final fueron los mismos que ayudaron a establecerlo: Luis Muñoz Marín y Antonio Fernós Isern. Ya en 1954, Muñoz Marín decía que el ELA, para realmente ser permanente, tenía que crecer y que los que quisieran su permanencia, tenían que luchar por su crecimiento. ¿Entonces, cuál es el ámbito donde debe crecer el Estado Libre Asociado? Primero: que quede claro que Puerto Rico está ubicado fuera de la cláusula territorial y que el Congreso no ejercerá autoridad unilateral sobre nuestra Isla,
KTA-Desde hace varios años, dentro del PPD se evidencia el desarrollo de un proceso en el que sus líderes han comenzado a analizar los aciertos y desaciertos del ELA, así como el futuro del Partido. Pero, dentro de esa discusión, lo que más ha sobresalido es la grave división ideológica que existe entre sus afiliados. Y tal parece que el sector derechista se ha apoderado de la colectividad. ¿Cuál es su opinión al respecto?
“El 19 de noviembre de 2010 curiosamente se cumplieron 20 años de la Asamblea de Ponce del Partido Popular Democrático. En aquella Asamblea se aprobó la llamada Enmienda Vizcarrondo, en la que se establece que el desarrollo del ELA debe ser basado en la soberanía
KTA- Sin embargo, recientemente José Alfredo Hernández Mayoral escribió una columna en un periódico de circulación nacional en la que afirma que los soberanistas no tienen espacio en el PPD.

KTA- Si la posición de Hernández Mayoral (compartida con Héctor Ferrer Ríos y de Alejandro García Padilla) prevaleciera, ¿usted abandonaria las filas del PPD? Porque, en su columna, el primero plantea que los soberanistas populares podrían moverse hacia el Movimiento Unión Soberanista (MUS).
“Si hemos ganado en siete asambleas, yo confió en que vamos a seguir prevaleciendo y que el Partido no abandonará la predica de un Estado Libre Asociado Soberano y fuera de la clausula territorial. Porque, si lo hiciéramos, nos quedaríamos sin proyecto de futuro. El problema de lo que plantea mi querido amigo José Alfredo es que no tiene visión de futuro. Al hablar de quedarnos como estamos, él no dice cómo vamos a arreglar nuestra economía, ni cómo vamos a creer nuevos empleos. Tampoco dice cómo generaríamos nuevas empresas. El ELA, como está, rindió un propósito importante y hay que reconocerlo y agradecerlo, pero los primeros que estuvieron claros en que la virtud de la asociación entre Puerto Rico y Estados Unidos era que se podía ir desarrollando fueron, precisamente, Luis Muñoz Marín y su generación. En ese sentido, me parece que el planteamiento de José Alfredo no se ajusta a las necesidades del Puerto Rico de hoy y a las aspiraciones de los populares”.
KTA- ¿Cuál usted entiende que es la diferencia que existe entre la soberanía que plantean los populares y la que impulsa el Movimiento Unión Soberanista (MUS)? Porqué si nos dejamos llevar por la definición de soberanía, sólo existe una.
“Exacto. Pero, David Noriega dijo que lo ellos plantean y lo que planteamos nosotros, los soberanistas populares, son cosas distintas. Hay que considerar el hecho de que los principales líderes de ese movimiento son personas que provienen, mayormente, del Partido Independentista. Por ejemplo, Carlos Gallisá fue representante del PIP y Noriega fue candidato a gobernador del PIP, al igual que Noel Colón Martínez. La diferencia radica en lo que uno quiere hacer con la soberanía. El MUS la plantea con el fin de adelantar su causa, esencialmente porque la mayoría de sus promotores, como ya expliqué, son líderes independentistas y por eso, el PIP se ha enfrascado en una pugna con ellos. Nosotros planteamos la soberanía para asociarnos. El derecho internacional reconoce tres usos íntimos de la soberanía: la Independencia, la Integración y la Asociación. Esta última es la que nosotros defendemos en el seno del Partido Popular Democrático. Al David decir que eso no es lo que ellos plantean queda claro que de lo que están hablando, en esencia, es la soberanía para construir la Independencia. Tienen pleno derecho a hacerlo, pero eso no es lo que quiere el sector soberanista del Partido Popular”.